‘’Más que el oro es la pobreza/ lo más caro en la existencia/ pobrecito mi patrón/ piensa que el pobre soy yo.’’ (Facundo Cabral) Cada vez que vuelvo a mi pueblo siento que revido. Lejos de él me siento ser un proscrito. ¡Puerto Plata!, mi tierra amada, mi origen, mi verdad, mi patria chica, mi pequeña roca que a la distancia me llama, me clama, me reclama, como una madre en busca de su retoño.
Aquí estoy en Luperón de Puerto Plata. Aquí estoy recargando energías perdidas, pese a la falta de energía eléctrica, que es sempiterna. Acá las cosas son increíbles. La energía eléctrica ha decidido pasar a ver la puesta de sol y el ocaso. Lo demás, es mandar a sus cobradores a cobrar puntualmente los apagones. Que por cierto, son muy caros. A este municipio le conocí en el 1993 y todas sus calles estaban ahoyadas, estaban cambiando el sistema de distribución de aguas, volví en febrero de este año, ¡Ah sorpresa! La habían destruido para instalar el sistema sanitario, pero todas al mismo tiempo, al igual que la otra vez. Volví el martes pasado y ¿qué creen? ¡ja..!
Pero si vieran sus playas. Si sintieran la amabilidad y la hospitalidad de su gente, la alegría de vivir y esa fraseología popular, ese regionalismo tan sabroso al hablar. Acá se quedó dormida la antigua lengua castellana. Comer el queso de hojas es viajar en primera clase al paraíso. ¡Y sus musáceas! ¡Los rulos! aquí saben a beso de mujer. Que por cierto ¡¡¡Cuan bellas son sus mujeres!!! Sirenas bípedas (hijas del mágico y enigmático Atlántico) que deslumbran con sus hermosuras y sus esplendorosas sonrisas. Sus lomas muchísimas, con sus trajes de un fresco verdor como ninguno. En Luperón cualquier corazón triste y solitario encuentra su destino…
Bueno mis queridos Tainos Locos Bohemios, ¿Quién será mi proscriptor, quien no me deja proseguir en mi proselitismo hacia la felicidad? ¿Quién será ese prosimio antediluviano que promueve mi infelicidad? ¿Quién propugna por prosternar mis propósitos y mis promesas de retorno? ¿Quién quiere prolongar mis saudades y mis morriñas por aquestas tierras que enloquecieron al descubridor..?
Al cogollito de un aromo me subí
A contemplar valles, lomas y quebradas
Y fue tanta la hermosura que yo vi
Entre los arroyos, las flores y las ensenadas
Vi framboyanes, caobas y pinares
Colibríes, gallaretas y sinzontes
Vi caracolas y maqueyes en el azul sus mares
Que no sabía si anidar en la mar o a los montes
Al mirar hacia Arrollo Amargo
Me sumergí en sus aguas cristalinas y cálidas
Pero fue en el Estrecho sin embargo
Que contemplé a las mariposas más bellas en sus crisálidas
Quise silbar dulces trinos
Con que conquistar una de aquellas deidades
Que allí florecen entre los pinos
Pero me enmudecieron sus sonrisas celestiales… Ransés 4:25p. m. 21 de octubre del 2011
‘’No hay tierra tan hermosa como la mía, bañada por dos mares de blanca espuma, parece una gaviota de blancas plumas, dormida en las orillas del ancho mar, Quisqueya la tierra de mis amores, de suave brisa y lindas flores, del fondo de los mares la tierra querida, Quisqueya divina, en mis cantares linda Quisqueya yo te comparo con una estrella, la estrella solitaria que alumbra mi vida, me brindas tu luz’’ (Rafael Hernández) Estoy aquí pero no soy yo. Así reza una frase muy popular, y así me siento hoy: Estoy aquí pero no soy yo. Mi alma baga por las interminables playas de mi media isla, tendida en una hamaca entre cocoteros; escuchado el alegre ‘’trinar’’ de la chiquillada, que impertérrita va y viene derrumbando castillos de arena, arrojándose puñitos de agua o corriendo juguetona tras una pelota de playa. Estoy aquí pero no soy yo. Cómo he de estar en esta ciudad tan insufriblemente cálida, donde todos parecemos perros jadeantes, arrastrándonos por calles inciertas de lugares remotos y extintos. Yo me veo oteando el rastro de unas pieles morenas con sabor a chocolate o de unas de nácar muy bruñido, con hijos de oro cayendo por cabellera. Me veo deteniendo a todo vendutero, que lleva en sus hombros tales ricuras: camarones, almejas, lambíes, y unos pulpitos que en la boca hacen travesuras. Me veo aprovechado la debilidad de la solana, cuando atenúa su ímpetu solsticiano, acicalándose coqueta con un pañolón de nubes, y yo metiéndome deprisa entre las aguas frescas del gran Caribe. Estoy aquí pero no soy yo. Prefiero estar abruzado con una tercia de ron o cañañá, muriéndome de frío en las sureñas aguas fresca de un río, que atajando con un triste acondicionador de aire los caninos fieros de este verano…
Después de descubrir que no somos nada, ante la inmensidad de un universo que sigue en crecimiento, entiendo menos el afán de tanta gente, que no se aceptan a si mismos como son, y se entregan al frenesí de los clones de las hojas de obsidiana. Tantos se rinden a los altares de la apariencia, que invierten sus caudales y su tiempo en una suerte de transforme, aún cuando por dentro, sigan siendo los mismos infelices; sean las mismas sus carencias; sean los mismos sus conflictos existenciales. De aquellos homos erectus a esta parte, un buen tiempo ha pasado, pero la humanidad sigue teniendo las mismas necesidades de aceptación, que desde los inicio de la historia. Quien se acepta a si mismo, le es más fácil aceptar a los demás. Quien se tolera encontrará el camino para tolerar a su prójimo. Los disensos corpóreos son una clara muestra de la grandeza de la imaginación divina. Al no hacernos a todos iguales, nos permite disfrutar de las diferencias o darnos cuenta de nuestra unicidad; de diferenciarnos en un mundo tan extenso que resultaría un imposible sin nuestras diferencias…
Bueno mis queridos Tainos Locos Bohemios, mi recomendación es ponerse sus ‘’bolos’’, sus chanclos de playa, agarrar su toalla playera, sus franelas de hoyitos, las gafas, bronceador, su paila repleta de espaguetis y pan de sándwich, su tubo de camión, convocar a un grupo de ‘’tigeres’’del barrio, mandar pal’ carajo a los políticos, psicólogos y cirujanos plásticos, darse una vueltita por uno de nuestros inconmensurables y ricos balnearios, derrúmbense en una hamaca o Chase long, sírvanse o pidan un trago bien largo, pregúntense: ¿Cómo vivirán los pobres? y hágase los locos, pues total, de músicos, poetas y locos…jajaja…todos tenemos un poco…abur
Acariciando tu piel, estar quisiera
Haciendo arpegios con mis dedos entre tu pelo
Descubriendo la primavera en cada poro
Haciendo de Big Ban, con caricia por doquiera
Descorriendo de la inocencia el velo
Y creando de nuestros suspiros y quejidos un coro
Frente a ti quisiera estar
Tapizándote con mis besos
Con susurros y con caricias
Dentro de ti quiero anidar
Florecer en ti como los cerezos
Provocándote emociones subrepticias…Ransés 1:17 p. m.
¡A verano que nos gastamos por esta media isla! Uno de los más tórridos de los últimos años. Andamos con la lengua arrastra. Parecemos bueyes viejos y cansados arrastrando con las carretas de nuestras vidas. Que por cierto; en esas carretas vamos cargando cada cosa: que el barrilito; los aumentos de los salarios de los funcionarios; las calles de las ciudades sucias y hoyadas; la extracción de los aluviones en los lechos de los ríos y su impune contaminación; las promesas de campaña; los aumentos de los productos de primera necesidad, los de los útiles escolares y las mensualidades de los colegios y universidades; los muertos por dengue; los chelitos que se embolsillan los funcionarios por la izquierda y por la derecha ¡Qué sé yo cuantas cosas más! ¿O sí sé...? ¡Carajo! Parecemos vieja reumática o el espíritu del Gran Almirante de los Mares Océanos. Si, ese mismo, el del Descubridor de estas tierras. ¿Cómo es que se llamaba? ¡¡Safa, no digo ese nombre ni aunque me paguen, va y se me pega er fucú. Así como lo leen, el pobre hombre llego hecho un guarapo a estas tierras. Que zozobra frente a las costas de Portugal el 21 de agosto de 1486, haciendo corso a las órdenes de Jorge el Griego; que se limpia durante 10 años en la tierra del oporto; que marcha a España y dura 8 años dando patas detrás de la corte de los reyes Católicos, a ver si le hacían caso con lo del descubrimiento; que le hacen caso, nos descubre y el 16 de febrero 1493 cae tullido en cama; que se pelea hasta con su madre por sus cuartos y títulos; que para septiembre-octubre de ese mismo año vuelve y le da otro patatús y lo ‘’engañan’’ con unos asuntos de unos caballos; que en enero del 1494 lo achicharran los mosquitos y cae redondo de paludismo; que el 25 de septiembre del mismo año le da una sirimba, se vuelve loco y cae largo a largo después de 32 días sin dormir, navegando entre Santo Domingo y Borinquen, posiblemente de tifus exantemático; que en el segundo y en el tercer viaje le hacen mal de ojos y le da conjuntivitis; que en el cuarto viaje los huracanes lo marean y reguila como un pollo matado por el pescuezo y se tira todo el viaje acostado en el camarote; que en octubre de 1502 en Costa Rica vuelve la sirimba y lo noquea; que en Jamaica en 1503 vuelven los huracanes, como buenos perros hueveros, y los jamaquean tanto que lo dejan cojo, medio loco y con la gota; que el 2 de febrero de 1504, tullido de la gota, se va de boca cuando cojeando se cae yendo a tratar de aplacar una rebelión en Jamaica, y hay que cargarlo en parihuela para que la masa irredenta no lo piquen; que al llegar del cuarto viaje atraca el pobre a Sanlúcar de Barrameda, en la madre patria, más ciego que una tapia, tullido, medio hidropésico bebiendo te de perejil y comiendo huevos de sepias, hígado de culebras de agua dulce y el del pez de hidro, hasta escorpiones de mar matado en vino, para su mal de piedras en los riñones y la vejiga; que para todos los viajes la miel de rosa: para los dientes picados y halitosis. En fin, que el pobre Gran Almirante, ya viejo y en las últimas, hasta fue mordido por la jaqueca y la reuma artrítica, para morir en una humilde posada por esos caminos intrincados de la Hispania siguiendo el rastro Real de los Católicos para que le devolviesen sus títulos, sus chelitos y tierras conquistadas… Como ven mis queridos Tainos Locos Bohemios, la crujía que estamos pasando ahora, por esto lares, es parte del fucú que nos legó el Gran Almirante, y así quieren que yo lo mencione, ¡Ay ñeñe! ¡Zafa! Atrévanse ustedes…ata’ dio y di pué, a volai que ei sol campea…¡¡¡Abur!!!!! Nota: los dejo con esta hermosa melodía de mi coterráneo Angel Lockward: Esta guitarra bohemia que vibra en mis manos ha comprendido que solo la pulso por ti Por eso tiene en sus cuerdas sonidos humanos hondos sonidos que expresan lo que pasas en mí Esta guitarra bohemia que tal fiel me ha sido que ha compartido conmigo placer y dolor La que por todas las notas siempre me ha seguido es confidente de mi hondo secreto de amor Es la quitara que llora por las madrugadas lágrimas suaves que arranco de su diapasón La que ha mirado conmigo tantas alboradas y comparte conmigo mi triste pasión Esta guitarra bohemia sonora y doliente vibra con mas sentimientos cuando es para ti Y su cordaje encantado parece que siente todo este amor que yo siento my dentro de mi
Hoy Santo Domingo está triste, tan triste como está mi alma. Ambas parecen alas de una paloma gris que revolotea los cielos. Hoy Santo Domingo luce aletargada, como detenida en el tiempo. Estática. Inmóvil. A la deriva. Así me siento yo, como el bolero: ‘’Es la cosa más triste de este mundo y así me siento yo, por ti solo por ti. ’’ El punto es que Santo Domingo está nublado; sus nubes solo son pañolones de plañideras cargadas de lágrimas al punto de ser derramadas sin un hombro de buena samaritana a quien recostarse. Sus árboles, a pesar del brillo, lucen melancólicos, como amantes burlados al borde del paroxismo. Todo en ti está gris Santo Domingo: tu termitero celeste, tus derruidas y sucias calles, tus viejas plazas, tus puertos, tus monumentos. Gris, todo gris, como mi alma. Y no hay nadie a quien contarle, a quien hablarle de nuestra tristeza, ni a políticos corruptos, ni a políticos perfumados, ni a funcionarios infuncionales, ni a ministros malamente administrados, ni a policías cazando retoños en la oscuridad, ni a pastores distraídos en la diatriba, ni a obispos, ni a funcionarios ahogados en buenas intenciones. A nadie, a nadie se lo podremos contar Santo Domingo… Taino Locos Bohemios, prisioneros de mis cuitas y nostalgias, no me culpen a mí sino al rocío que trae consigo soledades amargas o a la madrugada de fría manta. Culpen a la noche de horas tan larga y soledades tan hondas. Culpen a las caricias que baten sus alas, que fugaces besan y luego marchan… No me culpen a mi culpen a mi alma… Herido estoy
Tengo partida el alma
No sé si vengo o si voy
Y la tristeza como carga
No sé donde dejé el amor
O cuando de mi se apodero el dolor
Prisionero de los caprichos del corazón
Reo de Eva
Y de la flor…Ransés 11:13 27/08/2010
Recuerdo que de niño oía a los mayores decirle, con cierta severidad, a los niños: ¡No jueguen de manos! Y resulta que nosotros los humanos, y en especial en la infancia, al igual que muchos los animales necesitamos el juego corporal, tanto para establecer vínculos necesarios para nuestra inserción social, como para aprender a defendernos, como para obtener lo que recitaremos para la vida. Una persona tímida y de poco roce social será menos exitosa en la vida que una extrovertida y sociable. El juego es una imitación de la pelea, la guerra, de los combates entre enemigos, entre cazador y presa, solo que los participantes confían en no hacerse daño. Por eso se forma lazos afectivos, casi indestructibles, desde la niñez hasta la adultez, basados en la confianza, en la confianza de que se trata de un juego, en una diversión para aprender, para compenetrarse, para desarrollar habilidades, para dejar canalizar el exceso de energía, y que nadie le hará daño a nadie. Por eso cuando sus hijos y familiares tengan deseos de jugar piénselo mejor, anímese e intégrense aún cuando sea alrededor de un juego de bolas (bellugas)…
Pero, el juego no sólo sirve para desarrollar habilidades, canalizar energías y hacer amigos, atravez de éste los seres racionales e irracionales entramos en un estado de distención, relajamiento y gozo tan gratificante que nos produce alegría y mentras más alegre más felices y, si lo unimos a lo todo lo anterior, se pudiera decir que contribulle a formar ciudadanos menos deprecivos, menos sumidos en la soledad. Sólo una cosa, los politicos, sííííí, esos mismos: los politicos cuando juegan a la guerra, a los conflictos internacionales, al bonbardeo de campamentos de ancianos, mujeres, infantes y adolescentes refugiados, al bonbardeo de comboyes de alimentos y medicinas, de ciudades indefensas, no son nada divertidos, nada confiables, aún caundo a ellos les cauce felicidad…
Buenos mis queridos Tainos Locos Bohemios, prefiero los juegos de miradas y sorisas, los juegos en la cama, en la playa o por qué no en el comedor, con una piel contraria ronroneandome al oido, como gata en celos; las escaramusas de guerra de mis hijos, a la impúdica inocencia de maniaticos genocidas que pretenden destruirlo todo para asegurarse su felicidad…
Hay unos tipos en Wall Street
aprendices de alquimistas
haciendose ricos muy de prisa
que nos vuelven a todos pesimistas
entre risas y sonrisas
Juegan con papeles cada día
Llevandose por delante hasta la vida
Nuestros sueños y promesas
De un mundo mejor
Hay unos tipos en Jerusalén
Descendientes de las fieras
Matan niños y mujeres
Haciendo cuentos a los incautos
De que todo se hace
con permiso de Yavhé
Hay unos tipos en América Latina
Medios socios del Tio San
Según lo que se sospecha
Distrubuyendo porquerias
que destruye la humanidad
Hay unos tipos en Moscu
Que vendieron sus ojivas
Sus metrallas y fusiles
Mientras a los Mujiks y proletarios
Se les evaporaba los salarios
El honor enbalsamado
En un sarcofago del krenlin
Hay unos tipos del G-8
Descendientes de vampiros
Tienen el planeta mal herido
Enterrando sus colmillos
Sobre el agua y las flores
Las montañas, los colores
Tambien en el músculo de la fauna
Y de toda la progenie de Adán
Hay unos tipos por ahí… Ransés 3:30 pm 4/06/2010
Mi ciudad está nublada, mi ciudad está sofocándonos, mi ciudad está lluviosa, mi ciudad está estresándonos. Por ella va transitando toda la humanidad cargada de sus amores, desamores, ilusiones y miserias. En ella cohabitan buenos para algo y buenos para nada, miserables y misereados, imputados e imputables, rumiantes del odio y victimas de profesión, roedores del éxito ajeno y egos cargando lo que parece ser personas. ¡Qué extraña es esta ciudad!
En una tertulia de bohemios, el Poeta y filosofo (de lo cual todos tenemos un poco, además de lo de locos) A. Arvelo, frente al mar, nos hizo una pregunta nada inocente, pero con la inocencia que le caracteriza, ¿Por qué la mayoría de los poetas le escriben a la tristeza? Muchas cosas se dijeron en ese momento explicando o justificando tal aptitud. Yo, por mi parte dije y creo que al hombre siempre haber vivido en guerra desde las primeras formas de organización social en que cohabitó, por los escasos recursos que disponía o que podía explotar, en cada momento, ante su incapacidad de hacerlo, produjo en cada ser humano sentimientos de dolor y perdida tan terribles del cual no se ha recuperado jamás. La muerte talvez sea la creadora del más terrible de todos esos sentimientos. Pero si la historia de Adán y Eva fuese cierta, al verse expulsos de la presencia del Divino Creador y de su jardín del Edén debió producir en el alma humana la más profunda de las huellas de dolor, angustia y desamparo. Si le agregamos el fratricidio de Abel y la sentencia que cayó sobre Caín, talvez podamos entender por qué tantos, poetas, bardos y vates le escriben y cantan al dolor y al desamor…
Bueno mis queridos Tainos locos bohemios, la lluvia me ha sublimizado, demasiada filosofía con este calor sofocante, con el derrame del golfo de Méjico (por fin contenido) las bembitas de los candidatos perdidosos, los kilos perdidos (y no por efecto de ejercicios ni deportes) el 49 aniversario del magnicidio de un carajo que alguien le quiso llamar Rafael Leonidas, la falta de luz (energía eléctrica) y de cuartos, no permiten darle mente a vainas tan esotéricas, mejor vayan preparando sus ‘’bolos’’, sus franelas de hoyitos, sus chancletas samurai, la sopa de muela a la morena para que prepare los espaguetis, llenemos el tubo, contratemos la guagua para la gira, dejemos a los políticos en su fiesta de monos y abur…
Madre, a pesar tu cansancio
Madre, de tu poca economía
Madre, a pesar del abandono
Madre, nos cuidas y nos guías
Madre, ante el infortunio
Madre en la alegría
Madre en los maltratos
Madre en los triunfos y los fracasos
Madre: manos tibias que con caricias
Disipan nuestros temores y agonías
Madre: ojos fijos que vigilan nuestros pasos
Por el sendero angosto de la vida
Madre, a pesar del olvido
Madre en la distancia
Madre, a pesar que otro regazo
Nos proteja del frío
Madre, yo he crecido
Tengo hogar, mi leño
Y mis hijos
Pero a pesar de todo
Madre, hoy te canto
Te recuerdo y te lloro
Porque te fuiste madre
Porque ya no estas conmigo…Ransés 11:19 am 28/05/2010
¡Que cosas la del amigo Pat! Ahora resulta que a pesar de la caza como búfalos o guepardos y el extrañamiento; de los grilletes y el látigo; de los barcos negreros, las galeras y el transporte como sardina en lata; de la negación de la condición de seres humanos y de las subastas europeas; de las estelas de humanidad convertidas alimentos submarinos; del hierro, del plomo, del cepo y de la caña con sus diminutos y millonarios alfileres en medio de un ardiente sol caribeño; a pesar de los azotes y el abuso; a pesar del estigma racial y la salvaje explotación; del brutal trato y del estupro para nuestro ministro de la tele cristiandad made in USA aquel pueblo hizo un trato con el diablo para derrotar a los Grande y a los pequeños Blancos con sus napoleónicas soldadescas, justamente aquí en el lado occidental de Santo Domingo para obtener su independencia.
Creo sinceramente que a nuestro ministro del Club 700 el indómito pero ahora golpeado pueblo haitiano, por una de las tragedias más devastadoras que recuerde la humanidad, le debe merecer más respeto y consideración. Sus palabras lejos de ser y representar al Cristo y a su pueblo lucen procedentes de las entrañas mismas del infierno. ¿Cómo es posible que el señor Robertson se diga ministro de la iglesia cristiana, y que su corazón no se ablande y se filtre por lo menos algún sentimiento de piedad, de pesar y conmiseración ante tal hecatombe? Sinceramente Pat que Dios te perdone…
Bueno mis queridos locos bohemios, a pesar de que el show debe continuar, creo que ahora es tiempo de solidaridad y entrega para con el hermano pueblo haitiano sin resquemores ni mezquindades y pedir que descansen en paz aquello perecidos en la tragedia…
Justamente allí
En el lado occidental
De una pequeña isla
En medio de la nada
Y de todos
Floreció la injusticia
Pero nadie la veía
Por el dulce de su sabor
Justamente allí
A nuestra vera
Papillones de negras vestimentas
Cargada de iras contenidas
A filo de machetes y teas
Salían de la puerta del infierno
Justamente allí
Al costado oeste
De Santo Domingo
Imperios todos poderosos
Atraídos por el oro y el añil
El cuero y el azúcar
Por ‘’importados’’ músculos y caderas africanas
Aquí en el Caribe,
En medio del espanto
Quedaron boquiabiertas
Con lunas taladrándoles
Sus cristianas almas
Justamente allí
A la izquierda de Dios padre
Con dos y tantos siglos de dictadores
Algunas invasiones menores
Malos gobiernos
y el sordo oído de los ocho ricos de la Tierra
Del dolor y la miseria,
Hay un pueblo,
Más negro que la noche,
Que en una gris tarde de invierno,
pasó al horror y la hecatombe
Justamente allí… 11:15 Ransés 15/Enero/2010